deseo natal
Un destino sorprendente lleno de atractivos
Pero no es sólo el clima lo que atrae a los turistas. Las espléndidas dunas, el encantador azul de las aguas del mar y las incomparables lagunas hacen de Natal el viaje perfecto con vistas impresionantes y recorridos increíbles.
Playa de Punta Negra
La playa de Ponta Negra es la más famosa de Natal. Además del hermoso paisaje, restaurantes, bares y vida nocturna animan la región.
Ponta Negra está a unos 10 minutos en coche del hotel.
Cualquiera que vaya a la playa de Ponta Negra no puede dejar de subir al Morro do Careca, una duna de aproximadamente 107 metros, considerada uno de los principales símbolos turísticos de la ciudad.
El paseo en buggy por las dunas de Genipabu es uno de los favoritos de los turistas. En la playa que lleva el mismo nombre también es posible disfrutar del paisaje realizando un exótico paseo en dromedario.
En este parque con dunas y bosques protegidos, además de disfrutar de la vista privilegiada, es posible practicar actividades físicas, realizar caminatas o reunirse con amigos y familiares para un agradable picnic.
También conocido como Forte dos Reis Magos, el edificio es el punto de partida de Natal. Cualquier persona interesada en la arquitectura y la historia no puede ir a Natal y olvidarse de visitarla.
La Playa de Pipa es una famosa playa del municipio de Tibau do Sul, ubicada a 85 km de Natal. Hay mucho que hacer allí, pero lo más destacado son las actividades deportivas como el surf. Las hermosas olas y los buenos vientos lo convierten en un lugar ideal para los surfistas.
Para quienes prefieren mares tranquilos y aguas cristalinas, Maracajaú es una visita obligada. La playa de Maracajaú está a 65 km de Natal. Desde allí es posible acceder, en barco o catamarán, a los Parrachos de Maracajaú, que son piscinas naturales que se forman durante la marea baja. Observar la vida marina es, sin duda, uno de los grandes placeres de la región.